En
el mundo solo quedan
las
huellas de los que pisaron fuerte,
no
hace falta ser famoso para que se te recuerde.
Bastan
los momentos que vivimos juntos,
de
los que disfrutamos sin saber que se acabarían.
El
simple roce de tu pelo cuando te teñía,
o
las bromas que nos gastábamos, sin llegar a enfadarnos,
los
pequeños momentos en una fiesta en San Fernando
o
alegar sin parar de lo que no nos gustaba.
Son
Recuerdos que la muerte no puede llevarse,
ni
que una fuerte marea podría arrastrar,
ni
siquiera el viento los podría devastar.
Permanecerás
por siempre en mi memoria
en
un lugar solo escogido para ti,
cálido
y acogedor, para que te sientas cómoda.
Jamás
te irás de mis recuerdos
hasta
que la muerte me lleve,
como
te llevó a ti.
A la memoria de mi cuñada
Ana Mª Jiménez Gutiérrez
No hay comentarios:
Publicar un comentario